Un tratamiento odontológico óptimo no consiste simplemente en restaurar o reparar los dientes y las funciones estéticas y masticatorias. Es necesario que la situación inicial no vuelva a repetirse y, también, mantener en perfectas condiciones el trabajo realizado para que dure muchos años.

Una boca sana es una boca limpia con una carga baja de bacterias. Una boca sana no tiene problemas y no tiene enfermedades.

¿Cómo conseguirlo?

Muy sencillo: hay que adquirir hábitos regulares de limpieza y ésta debe llevarse a cabo con eficacia empleando la técnica correcta.

Aunque creamos que lo estamos haciendo bien, en muchas ocasiones esto no es así, ya que no nos han enseñado bien la mejor forma de hacerlo y la rutina hace que se pueda persistir en el error.

En Clínica Miñana se planifican visitas de mantenimiento y control llevadas a cabo por nuestras Higienistas dentales. En estas citas se muestra al paciente cual es la técnica de cepillado más adecuada a su situación y se dan consejos e instrucciones para el mantenimiento de su salud bucal.

Queremos que nuestros tratamientos duren años.